Por Luis Salas
En este pequeño escrito quiero plasmar mi visión acerca de la educación de la globalización, o de la pedagogía de la dominación, como se le quiera llamar. Es una pedagógica en función del capitalismo que se reproduce en distintos momentos, instituciones como el hogar, la escuela, el trabajo.
Es
fundamental hablar de la educación de la globalización porque en la actualidad
es la formadora de sujetos que serán capital humano, una herramienta, una
mercancía más del y para capitalismo. La educación se produce principalmente en
dos ámbitos, en el hogar y en la escuela, en ambos lugares tiene el mismo
objetivo, cultivar y reproducir una moral capitalista. Al ser una pedagogía de
la dominación, aniquila otras formas de educación, de cultivación del ser
humano. Sin embargo, no ha acabado con ellas, muchas pedagógicas han perdurado
durante milenios, que claro se han transformado, mas siguen manteniendo
elementos esenciales como el respeto a la madre tierra. Asimismo, el
capitalismo tiene grietas y una de ellas son las Universidades. Hinkelammert
nos comenta que:
“(…), enfrentar las amenazas globales es ciertamente un problema
político, pero no se puede tener éxito sin desarrollar una cultura que permita
y motive la responsabilidad. La Universidad es el lugar clave en la formulación
y promoción de esa cultura de la responsabilidad basada en una cultura de la
esperanza.” (Cf. Hinkelammert, 2005).
La Universidad y todo
el sistema educativo escolar tienen una obligación, la reproducción de la vida
toda, tienen que tener otra función y no tiene que ser en función del
capitalismo. Las empresas son las decretan qué tipo de estudiante se tienen que
formar, pero debe ser la vida misma quien tiene que determinar los estudiantes
que requiere para su permanencia.
Como seres humanos nos desenvolvemos en
distintos horizontes prácticos y uno de esos horizontes es la educación
(también horizonte pedagógico). La educación empieza en la casa, luego con los
demás integrantes de la familia, posteriormente serán las instituciones en las
que el ser humano se desenvuelve, como la escuela, el trabajo, etc., las que
nos sigan formando y conformando. Se puede decir que lo educativo está presente
en todos lados. Este horizonte educativo atraviesa los demás horizontes prácticos,
hay una relación, lo pedagógico se cruza con lo económico y/o con la política.
La pedagógica es un sistema que está delimitado por la educación, la formación,
la cultura, la ideología, la comunicación, la enseñanza, el aprendizaje, el
conocimiento, la sabiduría, la ética, etc., que tiene como subsistemas la
familia, la escuela, el deporte, los medios de comunicación e información, etc.
De esa manera, la pedagógica se relaciona con lo político en el momento en que
el Estado aplica e instaura los planes y programas de estudios; con el
económico cuando hay que pagar para estudiar, para comprar útiles; con lo
deportivo porque ahí se establece una disciplina, una rigurosidad, unos
valores; y así, con la diversidad de horizontes se cruza el horizonte
pedagógico y establecen una ideología, una cultura.
La educación se origina
en la casa, en la familia, ahí comienza nuestra forma de comportarnos frente a
los demás y frente a nuestra madre tierra. No es lo mismo nacer dentro de la
cultura moderna que dentro de una cultura originaria. El nacimiento en la
cultura moderna nos representa la individualidad, la separación inmediata del
hijo de la madre. En algunos casos, el niño es producto de la inseminación, y
al nacer, es llevado a otra parte, a la incubadora. En cambio, el nacimiento de un niño en una
cultura originaría es distinto. Ahí el niño nace en su casa, la partera recibe
al niño y lo entrega a los brazos de su madre, posteriormente al padre y los
miembros de la familia que estén ahí. Todos le dan la bienvenida a este nuevo
mundo, es la representación de una comunidad, más allá de la individualidad
moderna. Este primer acto, el de nacer, representa lo que después será nuestro
actuar. En la cultura moderna será la relación sujeto-objeto y en la originaria
sujeto-sujeto. Es por ello que el sujeto moderno sólo piensa en sí mismo, es el
egoísmo y ve a los demás como instrumentos a utilizar para su “bienestar”. Hay
una pedagogía de la dominación, que está al servicio del capitalismo, es una
pedagógica de la globalización y aniquila otro tipo de pedagogías existentes en
el mundo.
La pedagogía de la dominación
se ha encargado de formar ese humano que está inmerso en el desarrollo cientificista,
tecnológico, haciendo creer que produce beneficios. Es una pedagogía que
produce personas para trabajar día a día sin parar, genera personas a las
cuales les crea necesidades que en su origen no lo eran. Es ese sujeto
sumergido en la web, en el individualismo, en la competencia, en el consumismo,
en la ignorancia, en las guerras, en el miedo. La educación que recibimos es
producto de una pedagogía de la dominación que reproduce la cultura moderna que
nos ha traído al calentamiento global, a la extracción sin medida del petróleo,
a la descomunal tala de árboles, a la emisión de gases, así como las guerras
que se producen dentro de cualquier punto de nuestra madre tierra, a la
negación de un saludo. La educación que recibimos en la mayoría de los puntos
que nos paramos, nos conduce directamente a la destrucción de nuestro propio
hogar, estamos acabando con los recursos para que la humanidad siga viviendo
dignamente, estos hechos son consecuencia de una pedagogía de la dominación. Es
una crisis a nivel mundo, es la destrucción de éste por la avaricia de las
grandes industrias, que pretenden seguir aumentando la riqueza, a través de la
explotación de la madre tierra. Si bien, esto puede parecer un problema
solamente económico y político, pero también es fundamentalmente un problema
pedagógico, porque es ahí donde se da transmisión de valores, se enseña y se
aprende una forma de actuar, de comportarse. Esos valores no sólo se aprenden y
se refuerzan en la escuela, sino que se adquieren principalmente en casa, en la
calle, en el trabajo, en cualquier horizonte práctico en el que nos
desenvolvemos. En todos los ámbitos, de manera implícita o explícita está
presente la educación y con ella un campo pedagógico que tiene de contenido una
moral formada y conformada por el mismo entorno.
La ideología que se
reproduce con la pedagogía de la dominación es la capitalista y ésta consiste
en seguir explotando la naturaleza, en hacer más guerras para acumular riqueza.
Es una ideología que se ha aprendido a través de la educación recibida. Un
soldado es educado para matar a otras personas de otra cultura y un profesor
fue educado para educar y transmitir los valores del capitalismo. La pedagogía
de la dominación nos ha conducido a ver al otro sujeto con el cual hay que
competir para demostrar quién es el mejor, quién sabe más. Es una pedagogía de
la dominación que lleva consigo una ética que fomenta, reproduce los valores
del capital y por ello nos ha llevado a la destrucción de la naturaleza, la
naturaleza no tiene valor, no tiene sentido, por lo tanto, el capitalismo
(Banco Mundial, Fondo Monetario Internacional, principalmente (Cf. Hinkelammert. Prólogo. 2018) le dan
el sentido, ellos establecen las normas. En cambio, en la cultura originaria,
el sujeto ve al otro como igual, es otro con el cual se complementa, uno no
sabe más que el otro, es una pedagogía distinta.
Nuestro sistema educativo
como institución escolar está conformado desde el prescolar hasta la
universidad y nos preguntamos: ¿cuál es su función de este sistema?, ¿dar,
producir conocimiento para poder enfrentar de manera crítica nuestra realidad
caótica?, ¿para acumular conocimiento y creer que entre más estudiamos más
conocimiento tenemos?, ¿sólo es un medio
con el cual nos tienen controlados para mantenernos ocupados en algo innecesario,
en hacer pasajero lo real y producir una realidad falsa?, ¿para producir la
mano de obra barata calificada y después salga a pedir empleo el cual cada vez
es más escaso?
Regresando al sistema
educativo moderno, que está compuesto desde la Secretaría de Educación hasta el
intendente de cualquier escuela, siempre con docentes y estudiantes, es una
institución que sirve como mecanismo ideológico que controla gran cantidad de
gente, que forma y conforma la manera de pensar, de ver lo real y de actuar
frente a la realidad que se construye. Resulta que ya no se puede reprobar a
los estudiantes, aunque no sepan en absoluto sobre las asignaturas, con sólo
asistir será suficiente para acreditar un curso. De esa manera, los estudiantes
no toman la seriedad que se le debe de dar a la escuela, no hay una exigencia
en ellos mismos. Y qué decir de los profesores que aceptan las condiciones
impuestas por los directivos y la Secretaría de Educación; obviamente, si no
acepta las reglas impuestas es despedido. Se ha convertido en un sistema donde
ni siquiera se deposita el conocimiento. Son escuelas creadoras de capital
humano y las empresas serán receptoras de ese capital. Los estudiantes
circulando como una mercancía más que se vende y se compra. Los profesores año
con año enseñan lo mismo, sin pensar lo real, siempre repitiendo los mismos
temas del mismo libro, también como mercancías vendiéndose a escuelas privadas.
No salen de su confort, no se atreven a pensar y a exponer lo que piensan
frente a los demás. Son doctrinarios, incapaces de enfrentar de manera crítica
el mundo que está en su alrededor. Así, hacen de los estudiantes personas que
no analicen sobre su vida cotidiana.
Los estudiantes planean
estudiar para adquirir un conocimiento que les dará la posibilidad de estar
mejor económicamente. El estudiante se vende por lo que sabe. Sin embargo, los
estudios ya no garantizan esa estabilidad económica. Por su parte los
directivos sólo se encargan de la burocracia, de mantener el orden
institucional, sancionando a quien no cumpla con las normas jurídicas
establecidas dentro de las instituciones escolares. Existen alrededor de 208
mil planteles escolares, de nivel básico en todo México, de los cuales muchos
están en peores condiciones, sin luz, sin bancas, sin pizarrones entre muchas
cosas más que actualmente se necesitan para ser una escuela de un alto nivel de
enseñanza-aprendizaje. Se preparan estudiantes para el trabajo cuando no lo hay
y el trabajo es el de aniquilar la naturaleza. No importa el futuro de los
jóvenes, ni del planeta, lo que importa es el desarrollo y crecimiento del
mercado capitalista.
Ahora bien, desde el
2006 hay una tendencia a la desaparición de la filosofía como asignatura,
principalmente en el nivel superior y nivel medio superior. ¿Qué implicaciones
tiene la desaparición de la filosofía? que las ciencias pierden objetividad,
fundamento, crítica, ya que la filosofía es la madre de todas las ciencias, es
pensar la realidad para mejorarla, cosa que no está sucediendo. Al desaparecer
la filosofía desaparece la crítica a la razón y a la ética capitalista que
implanta sus valores y los vuelve universales. Al evaporarse la filosofía el
pensamiento hegemónico prevalece y expande sus dominios. Sin filosofía no
podríamos develar que la realidad es falsa.
[…] la ausencia casi constitutiva de la filosofía en
la educación secundaria (bachillerato) de ningunos países del mundo anglófono
en los cuales existe como mucho como materia optativa, como ocurre en el Reino
Unido y en algunas escuelas de América del Norte. En Cambova se nos señala que
<>. En la República de
Moldova, se han reemplazado los cursos de filosofía de los institutos por
cursos de educación cívica y derecho que son impartidos por profesores sin
formación filosófica. En la Federación Rusa no se enseña filosofía en el nivel
secundario. (Cf. UNESCO, LA FILOSOFÍA,
UNA ESCUELA DE LA LIBERTAD, 2011).
Hace
apenas unos días el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro acaba de quitar todo
apoyo económico a las carreras de humanidades porque no tienen fundamento de
ser en este mundo empresarial. En México ya lo vienen haciendo desde hace de
más de una década. Acaban de sacar una lista de las mejores y peores carreras
pagadas y ni siquiera aparece Filosofía. ¿Qué índica?, que ni siquiera existe,
no se menciona, no tiene sentido en este mundo productivo. La filosofía y las
carreras humanísticas no tienen valor e importancia. En México comenzó con la Reforma Integral de
la Educación Media Superior (RIEMS) impulsada por el expresidente Felipe
Calderón.
Con
todo esto quiero decir que hay una estrategia impulsada principalmente por el
Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional. El estudiante en primera
instancia tiene que invertir en sí como dueño de sí, aún está dentro de la
institución educativa, no sale a pedir empleo, se está preparando para ello. Al
concluir sus estudios saldrá a pedir empleo, el cual no lo hay, y la empresa
que lo llegue contratar es la receptora del estudiante, del capital humano, el
humano pasa a ser un miembro más de la reproducción del capital, vendiendo su
fuerza de trabajo. Las escuelas forman al capital humano y la empresa es
receptora de éste, la empresa paga porque compra la fuerza de trabajo que ha
sido calificada como apta para realizar dichas funciones de producción. Las
instituciones educativas pasan a ser un lugar de producción en función de la
rentabilidad de las empresas. Son las empresas las que deciden qué tipos de
personas quieren formar. Por esa razón es que la filosofía ni siquiera figura
entre las peores carreras pagadas (Cf.
www.aristegui.noticias
29/abril/2019) Franz Hinkelammert ya lo
había anticipado y comenta que: “(…) hay
una estrategia mundial, conducida por el Banco Mundial, para reducir toda
educación, pero especialmente la Universidad, a un lugar de producción de
“capital humano” que es considerado un medio de producción.” (Cf. Hinkelammert, 2001).
Ahora
bien, en la actualidad el valor es el del dinero y no el de la persona. Los
jóvenes tienen un dicho: “prefiero vivir cinco años como rey a toda mi vida
como buey”. ¿Qué quiere decir?, que ya ni siquiera importa la educación escolar,
lo que importa es tener dinero de cualquier manera, aun matando a otras
personas. Es decir, el valor de la vida misma ya no existe. La vida deja de
tener valor y se mata por matar. El respeto, la generosidad, la tolerancia, el
buen vivir, han desaparecido. Junto a la educación escolar está la educación de
la calle, que ha aorillado a los jóvenes a desertar de los espacios escolares y
los ha introducido en espacios violentos para adquirir de manera muy rápida grandes
cantidades de dinero. Esa es la razón por la cual abandonan las instituciones
académicas. Ambas formas de educación nos están llevando al mismo camino, la
desaparición de un buen vivir. Es así que la educación académica queda inmersa
en la problemática de la globalización. La educación es encuentra en los
parámetros establecidos por el FMI y el BM, es la educación en función del
capital (para los jóvenes que pueden estudiar) y la acumulación de la riqueza.
La educación escolar como una herramienta para seguir dando permanencia al
mismo sistema, como un utensilio que siembra la cultura de la
irresponsabilidad, nublando los ojos para no poder observar los grandes
problemas a los que nos enfrentamos como humanidad.
Para concluir, vemos
que la educación se da principalmente en tres lugares, en la casa, en la
escuela y en la calle. En estos lugares los valores han ido cambiando por el
recorrer de la misma historia. Se puede decir que hay implícitamente una ética
capitalista que permea la sociedad entera con la moral transformando el
comportamiento de las personas y ésta se ha venido permeando y expandiendo por
más de 500 años. A mi parecer, esta situación que pasa en México no es
exclusiva de aquí, me atrevo a decir que sucede en gran parte de mundo. Es la
globalización de la educación capitalista, de la pedagogía de la dominación. La
educación que recibimos nos está conduciendo al suicido colectivo.
¿Qué panorama nos espera?, la experiencia en
las comunidades originarias y el maestro Lenkersdorf nos enseñaron que tenemos
que aprender de otras pedagogías. Esas culturas, son ellos los que realmente
reproducen la vida, quienes cuidan del planeta. Llevan milenios y siguen con
vida combatiendo el capitalismo. Siguen defendiendo sus tierras frente a las
mineras a costa de su propia vida. Ese es el camino que tenemos que tomar si
queremos extender nuestra existencia como humanidad. Por supuesto que en muchas
instituciones educativas escolares, en todos los niveles, hay profesores,
estudiantes, investigadores, etc., que hacen lo que hacen para mejorar este
mundo caótico. En las escuelas también hay grietas del capitalismo, y hay que
hacerlas crecer para romper con él lo que nos destruye.
Luis Alberto Salas González
Bibliografía:
Hinkelammert, Franz. 2005. La Universidad frente a la globalización.
Santiago de Chile. Revista Polis, vol. 4, número 11.
_________________. 2018. Totalitarismo del Mercado. El
mercado capitalista como el ser supremo. Madrid. Akal.
UNESCO. 2011. LA FILOSOFÍA, UNA ESCUELA DE LA LIBERTAD.
Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura.
Sector de las Ciencias Sociales. Universidad Autónoma Metropolitana.
Iztapalapa.
Aristegui, Carmen. 2019. Noticias Aristegui. 29 de
abril, 2019. www.aristegui.noticias
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